Esta
receta es muy buena, porque en vez de obtener un grosero cheesecake de tres
metros de altura (toda una oda a la gula y el atragantamiento), tendrás uno de
tamaño casero, alto como una tarta y deleitable para la familia. He probado muchas
recetas que saben a kuchen de ricotta, a cheesecake cuajado….pero este es el
definitivo, el oficial, inigualable Clásico Cheesecake sabor vainilla y queso
crema casero.
Ingredientes:
Masa
75 gr de mantequilla y un poco más para enmantequillar el molde
90 gr de galletas de vino u otras
Relleno
350 gr de queso crema tipo Filadelfia (a temperatura ambiente)
150 gr de azúcar
Ralladura de un limón
2 huevos
2 yemas
100 ml de crema
1 cucharadita de esencia de vainilla
* Se necesitará de dos moldes redondos (uno más grande que el otro) o
uno redondo y uno cuadrado (el cuadrado más grande). Eso porque este postre se
cocina a baño maría en el horno.
Procedimiento:
Precalentar el horno a 160°C (horno medio bajo). El
un bowl poner la mantequilla y derretir en microondas a potencia muy baja (que
quede muy suave, no derretida y aguada, si pasa eso, no es grave). Luego, moler
con la 1,2,3 o manualmente las galletas hasta que queden como polvo o arena.
Mezclar con la mantequilla y con un tenedor juntar hasta que quede una pasta
maleable. Aplastarla con las manos en el fondo y algo a los lados de un molde
redondo enmantecado. Llevar mientras tanto al refrigerador.
Para el relleno en otro bowl poner el queso crema y
con un batidor (eléctrico o manual) batir para dejar cremoso. Incorporar el
azúcar y batir por 1 minuto. Luego incorporar la ralladura, los huevos uno a
uno, y las yemas una a una. Luego, verter la crema y la ralladura de limón y
batir hasta que quede una mezcla homogénea.
Verter la mezcla sobre el molde que estaba en el
refrigerador y poner el molde sobre otro más grande. Verter agua hirviendo
sobre el molde grande para que el molde chico se cocine a baño maría. SI el
molde chico es muy bajo, podemos poner alusafoil a su alrededor para que el
agua no salpique el interior. Llevar así al horno y hornear por 40 minutos
(revisar a los 30 minutos) o más, pero hasta que los bordes estén muy
ligeramente tostados y el centro esté firme. Sacar del horno, dejar enfriar
algo y refrigerar al menos 2 horas antes de consumir. Si se los prepara de un
día al otro, queda aun mejor.
Nota: se lo puede adornar con berries, nueces, manjar,
etc. Y al relleno se le pueden incorporar otras esencias y sabores.
se ve muy rico, y fácil de hacer
ResponderEliminarpor cierto: "alusa fooooooil" xD